Tradicionalmente, el sari se ha definido como una sola pieza de tela sin costuras, a menudo con secciones más gruesas para permitir que cubra correctamente. Su borde (similar a un dobladillo) se tejería con una mayor densidad, al igual que su ‘pallu’ (la pieza final a menudo decorativa).
Pero hoy, su definición se extiende para incluir textiles tejidos por molino oa mano, a menudo con una densidad constante. El término ‘sari’ también ha evolucionado para incluir materiales contemporáneos, como algodón, seda, fibra sintética y otros como el poliéster.